Muchas veces nos ha ocurrido que por las tardes nuestro bebe comienza a llorar sin razón alguna, el bebe encoge sus piernitas, llora mucho y se pone rojo y después de un rato, deja de llorar y se queda tranquilo.
Estos son los famosos cólicos. No ha todos los bebes les pasa, sin embargo a los que sí, les sucede entre la segunda o cuarta semana de vida y puede durar hasta los tres o cuatro meses, normalmente, conforme van creciendo los bebes, los cólicos van disminuyendo hasta desaparecer.
Se piensa que una de las causas podría ser que hay aumento en el movimiento intestinal, que, aunado al llanto, provoca que el niño trague mas aire y produzca flatulencias.
No debemos espantarnos cada vez que sucede, al contrario, debemos saber que es proceso benigno y funcional que a fin de cuentas va a desaparecer. Y cada vez que a nuestro bebe le den cólicos, podemos ayudarlo con lo siguiente:
Primeramente cuando vayamos a darles de comer, debemos encontrar un lugar tranquilo y relajado, la mamá o la persona que vaya a alimentarlo debe estar tranquila.
En el caso de que se este amamantando, se recomienda evitar la ingesta de aire y que el bebe este no mas de 10 minutos por pecho. Si es leche preparada debemos verificar que la mamila este lo mas vertical posible.
Al terminar debemos ayudar al bebe a expulsar los gases, esto lo hacemos dándole unas ligeras palmaditas en la espalda.
Si nuestro bebe tiene
cólico podemos darle un suave masaje abdominal para ayudar a calmarlo.
Recordemos que los sonidos y movimientos rítmicos pueden ayudar a que se calme un
bebé durante una crisis, podemos mecerlos suavemente, poner música relajante, etc.
Es muy importante que no le des medicamentos sin que lo hayas consultado con su
pediatra, podrías causarle un problema mayor.
Ya con algunos consejos de cómo manejar esta situación, puedes estar más tranquila, lo único que los papas necesitamos es invadirnos de paciencia y tomarlo con calma.
